El humorista cubano Ulises Toirac compartió una actualización sobre su estado de salud luego de contraer Chikungunya, enfermedad que le ha provocado fuertes dolores articulares, especialmente en el cuello, los hombros y la columna lumbar.
A través de una publicación en su cuenta de Facebook, Toirac tranquilizó a sus seguidores asegurando que se encuentra estable. “Para los que han preguntado: ¡ESTOY ENTERO!”.
El comediante explicó que los dolores se concentran con particular intensidad en las hernias que padece entre las vértebras L4 y L5, lo que limita notablemente su movilidad.
Además, comparó su nivel de energía con el de una batería de teléfono móvil, afirmando que comienza el día con “100 % de carga” y que al llegar la noche su cuerpo le exige descanso inmediato. A esto se suma la recuperación de una inyección intravítrea en el ojo izquierdo, procedimiento que le provocó durante varios días dolores intensos y fotofobia.
Toirac comentó que los apagones eléctricos le resultaron útiles para sobrellevar la sensibilidad a la luz, en una alusión directa a la Unión Eléctrica (UNE), aunque aclaró que ya no los necesita.
Fiel a su estilo humorístico, el artista recurrió a una anécdota para describir su proceso de recuperación: “El cubo Rubik me lo mandó mi fisioterapeuta. Le pregunté cuándo se me iba a quitar la Chikungunya y me dio eso y me dijo: ‘cuando puedas darle la primera vuelta a este tareco’. ¡Yo que ni puedo sacar a orinar bien a mi inseparable vecino de los bajos!”.
Toirac agradeció las muestras de preocupación y afecto de su público y concluyó su mensaje con: “Estoy como el país”.


A continuación, se reproduce íntegramente el texto publicado por Ulises Toirac:
Gus molning for ol de piporisnáis in de larch an ameizin guorld.
Pa los que han preguntado: ¡ESTOY ENTERO!
La chikungunya está sabrosona instalá en lo que es cuello, hombros y columna, con especial cariño en las hernias que tengo entre L4 y L5. Parezco además la batería de un teléfono móvil; me despierto en la mañana con 100 % de carga y ya a las nueve de la noche me sale un cuartel: “Ponte a cargar que te vas de circulación”.
De la inyección intravítrea en el ojo izquierdo me estoy recuperando bastante bien. Pasé dos días que los dolores y la ardentía me tenían como perro que arrastra el c***. Un volcán. Y lo más curioso: como tenía fotofobia (molestia intensa a la luz), agradecí muchísimo los interminables apagones que cortésmente la UNE me regaló en atención a mi estado. YA SE ACABÓ, UNE, ¿ME OÍSTE?
El cubo Rubik me lo mandó mi fisioterapeuta. Le pregunté cuándo se me iba a quitar la chikungunya y me dio eso y me dijo: “cuando puedas darle la primera vuelta a este tareco”. ¡Yo que ni puedo sacar a orinar bien a mi inseparable vecino de los bajos!
En fin. Gracias por preguntar por mi salud.
Estoy como el país.

