El boxeador cubano Yordenis Ugás y su pareja Dayanara denunciaron el robo perpetrado en su vivienda en Las Vegas el pasado 15 de febrero e informaron que se encuentran ofreciendo 15 mil dólares a quien los ayude a dar con los ladrones.
A través de sus redes sociales, Dayanara compartió este viernes 24 de febrero imágenes de las cámaras de seguridad de la casa, en las que se muestra a los sujetos que ejecutaron el robo.
Junto a las instantáneas escribió: “Con la pena del mundo les pido que, por favor, todos mis seguidores compartan este post. Solo el que ha pasado por un robo así sabe lo doloroso que es que invadan tu privacidad de la manera más ratera. Ya los audios de las cámaras mañana los tendremos, lo más triste es que son cubanos”.
“El día 15 de febrero a las 4:00 a.m. entraron en nuestra casa dos cubanos en un Mercedes-Benz blanco glc. Rompieron la puerta, rompieron un carro, me rompieron una pared para llevarse la caja fuerte que, gracias a Dios estaba vacía. Le robaron los cinturones a mi esposo que tienen un número de serie y eso aparece”, prosiguió.
“Me robaron 5 carteras y una mochila. Más nada que eso, que el Dios al que yo le sirvo me lo va a multiplicar y a ustedes les tocará pagar con cárcel. Ya el reporte policial está hecho, esperen noticias. Todo el que me aprecie a mí o a Yordenis, comparta a estas dos lacras de Las Vegas, que aquí todos nos conocemos”, añadió.
“Voy a estar publicando las carteras que me robaron. Miren todos los videos que se les ve claramente la cara. Compartan, el que nos ayude a dar con ellos, estamos dando una recompensa de 15.000 dólares”, concluyó.
De igual modo, en sus historias de Instagram compartió imágenes de los ladrones, así como de las carteras robadas.
Por su parte, Yordenis Ugás también publicó las grabaciones de las cámaras de vigilancia de su residencia.
En el año 2019, el atleta sufrió un robo en el apartamento en que vivía en aquel entonces. Al cumplirse un año del hecho, Yordenis señaló en sus redes sociales: “Se llevaron todo, se llevaron todas las cosas materiales, se llevaron dos carros y, sobre todo, se llevaron cosas que no tenían precio, pero lo que no se llevaron y nunca se llevarán fue mi fe, mi voluntad, mi espíritu y mis ganas de superarme, porque gracias a Dios todo eso vive dentro de mi corazón”.
