El peleador cubano de artes marciales mixtas (MMA) Gustavo Trujillo, difundió en las redes sociales un video en el que se muestra la dura travesía que afrontó su madre en su periplo hacia el reencuentro con él en Estados Unidos.
A través de su cuenta de Facebook, el atleta compartió una grabación en la que se muestra a su madre deslizándose por el lodo en la selva del Darién, al tiempo que expresaba: “Llevamos como tres horas rodando, miren esto caballero, para que cojan. El que me diga a mí que le dé una recarga a Cuba me cago en su madre. Cuando yo diga Díaz-Canel, ustedes dicen Sing**. Díaz-Canel Sing**, mira cómo me tienes”.
La publicación consta además de un mensaje de Trujillo en el que señala: “La libertad se conquista con esfuerzo y sacrificio. Esta es mi madre, haciendo el cruce de La Selva del Darién, donde diariamente mueren cientos de cubanos buscando el sueño de la libertad. Soy afortunado de tener a mi madre hoy conmigo después de 7 años y estoy orgulloso de ella por arriesgarlo todo, hasta su vida por estar a mi lado. Fueron días de mucho sufrimiento y miedo, pero ella me demostró que es una valiente guerrera y que una madre hace todo por su hijo. ¡Gracias Dios por cuidarla! Gracias mamá por todo tu sacrificio por mí. Te amo”.
Posteriormente el deportista compartió en los comentarios, una imagen de su madre en la que se mostraba muy alegre disfrutando de la tranquilidad de su hogar: “Miren cómo está la muñeca” .
Los seguidores del atleta reaccionaron ante los percances de la travesía de su mamá: “Dios mío lloré al ver este video, qué bueno tienes a esa luchadora, esa guerrera contigo. Tu mami es lo máximo, que cómica, Gracias Dios porque otro hijo pudo reunirse con su madre. BENDICIONES” … “Dios te la bendiga con mucha salud y alegrías” … “Qué linda, jaja Dios te la bendiga siempre, yo pasé por esa selva para llegar aquí y sé lo que pasó. Tú eres un salvaje con su mismo valor, gracias por lo que haces por todos los cubanos”.
El pasado 21 de agosto el atleta había compartido un video en el que se observa junto a su madre en el reencuentro y escribió: “Ahora tengo todo lo que necesito para ser feliz. Después de 7 años sin abrazar ni ver a mi madre, ella está aquí conmigo. Gracias a Dios primeramente y a todas las personas que nunca me abandonaron durante este proceso. ¡Bienvenido a los Estados Unidos de América! ¡Bienvenido a la libertad! ¡Dios es bueno!”.