Las autoridades de Las Bahamas deportaron a 44 migrantes cubanos que habían sido arrestados por llegar de manera ilegal a ese país con el objetivo de continuar su travesía hacia Estados Unidos para solicitar asilo político.
Se trata de 40 hombres y cuatro mujeres que se encontraban en el centro de detención Carmichael Road y que fueron enviados de vuelta a La Habana siguiendo las directrices que marca la ACNUR para las repatriaciones.
El Departamento de Inmigración de Las Bahamas emitió un comunicado en el que explicó que en el vuelo donde viajaron los migrantes cubanos se siguieron todos los protocolos sanitarios para evitar posibles contagios de coronavirus.
“Esta escolta conjunta de la aplicación de la ley dirigida por Stephen Laroda, superintendente de inmigración, se efectuó a bordo de un vuelo chárter de Bahamasair con todos los protocolos COVID-19 del Ministerio de Salud estrictamente aplicados. La salud, el bienestar y la seguridad de nuestros agentes, las contrapartes de las fuerzas del orden y los migrantes siguen siendo la máxima prioridad en este entorno de COVID-19. El Departamento de Migración agradece especialmente al Ministerio de Relaciones Exteriores, al Ministerio de Salud y a la Embajada de Cuba por su habitual y total cooperación”, dice el comunicado.
Además, recordaron que Las Bahamas se encuentra comprometida a respetar la integridad de los migrantes y a hacer cumplir las leyes migratorias del país, también dijeron que la migración ilegal es peligrosa porque las personas pueden caer en manos de bandas organizadas o de grupos criminales.