El camionero cubano Rogel Aguilera-Mederos, fue sentenciado a 110 años de prisión por las autoridades judiciales de Denver, Colorado, por el accidente mortal del 25 de abril de 2019 en la Interestatal 70, en el que fallecieron cuatro personas y diez resultaron heridas.
Según informó el lunes la cadena de noticias CBS4, la madre y demás familiares del joven rompieron en llanto una vez que este entró a la sala del tribunal: “Estoy pidiendo perdón. Deseo que todo el dolor de corazón se vaya de todos nuestros corazones”, dijo Rogel.
Los familiares de Aguilera-Mederos le indicaron al juez que el joven es un buen muchacho y que no era su culpa perder los frenos, a lo que el juez respondió que no estaba enojado con el acusado, simplemente tenía que sentenciar según lo establecido en la ley.
Familiares de las víctimas mortales del accidente se dirigieron al tribunal. La madre de William Bailey, afirmó: “Las madres no deberían tener que enterrar a sus hijos”. Entretanto, el hermano y la esposa de William, describieron el dolor que han sufrido desde su muerte.
Aguilera había sido declarado culpable de 26 cargos de los 41 que inicialmente se le imputaban, incluyendo 4 cargos de homicidio vehicular. Fue declarado inocente de 15 cargos de agresión en primer grado. Los 110 años de sentencia de Mederos son el acumulativo de sentencias mínimas declaradas por el juez por cada cargo al que fue encontrado culpable.
En una entrevista concedida a Telemundo Denver el pasado mes de noviembre, Aguilera desde la cárcel expresó: “Quiero decirle a esas familias que eso nunca fue intencional, yo quisiera que ellos me perdonaran y que Dios haga el milagro y toque su corazón. Un milagro para mí sería darle un abrazo a esa familia, decirles cara a cara cómo me siento, que me perdonen, que le juro por Dios yo prefería haberme muerto”.
“Nunca me fui para arriba del tráfico y todos los días le pregunto a Dios por qué me dejó vivo. Yo cambiaría mi vida por la de ellos cuatro, sólo Dios sabe por qué me dejó vivo a mí, yo no lo elegí”, dijo entre lágrimas al periodista Yesmani Gómez.
“Dios sabe cómo yo soy, hubiera preferido morir yo antes que murieran esas personas, Dios sabes cuántas veces le he preguntado por qué ellos y yo no”, lamentó.