Un agente de la Seguridad del Estado acudió el jueves a la vivienda de la madre cubana Bárbara Farrat Guillén, cuyo hijo se encuentra injustamente encarcelado tras los sucesos del 11J, y que convocó a un segundo ayuno voluntario de 24 horas para este día.
Farrat Guillén declaró a Radio y Televisión Martí que el esbirro fue a pedirle que depusiera el ayuno previsto para este jueves, ya que había visto su convocatoria en las redes sociales.
“Me puse nerviosa y en el momento empecé a llamar a todas mis amistades para que estuvieran al tanto. No es ningún oficial, es uno de la Seguridad del Estado porque su carné dice DSE (…) Entonces vino a hacerme preguntas sobre la detención del niño y todo lo que ha sucedido hasta ahora. Que él, como cubano, me pedía que no hiciera más ayuno, que la gente no nos apoyaba”, relató la madre.
En tal sentido, respondió: “No me importa si me apoyan o dejan de apoyar, lo que importa es que, por lo menos, he llamado la atención de ustedes, porque si no es gracias a ese ayuno, no lo tuviera sentado aquí en la sala de mi casa. Así que algo he logrado, por lo menos llamé la atención de ustedes”.
Su hijo Jonathan Torres Farrat de 17 años de edad, se encuentra injustamente encarcelado desde el pasado 13 de agosto, acusado de los presuntos delitos de “desorden público”, “atentado” y “propagación de epidemias”.
El joven fue detenido luego de una entrevista en la estación de Acosta, en la capital cubana, fue trasladado a la prisión del Guatao y posteriormente a la Prisión de Jóvenes de Occidente.
La hija del adolescente nació luego de que fuera injustamente encarcelado, razón por la cual la madre de él comparte imágenes de ambos en sus denuncias en las redes sociales.
Farrat realizó su segunda convocatoria a través de las redes sociales, donde escribió: “Para todos los padres, yo los vuelvo a invitar a un segundo ayuno de 24 horas el 2 de diciembre por nuestros hijos, o nos los devuelven o morimos intentándolo”.