La cubana Marlen Quesada Morera, denuncia la injusta encarcelación de su hijo de 26 años tras los sucesos del 11 de julio en Güira de Melena y exige su inmediata liberación.
Marlen, de 58 años de edad, se siente muy dolida tras la encarcelación de su hijo Yasdanis Benítez Quesada, quien ha permanecido recluido durante casi dos meses bajo los presuntos delitos de “sabotaje y robo con fuerza”.
En una entrevista exclusiva con la plataforma CubaNet, la madre afirma que el 11 de julio en horas tempranas de la noche ella mismo entregó a su hijo en la unidad policial más cercana a su residencia, y recibió la orientación de una oficial de que debía marcharse para su casa, ya que su hijo sería objeto de una investigación.
“Me lo sacaron de la policía de madrugada para que yo no lo viera, porque a todos los padres les dijeron que se fueran y se lo llevaron de madrugada, no lo pude ver, lo llevaron para Artemisa. Yo como loca porque no se sabía dónde estaba mi hijo”, apuntó la madre desconsolada.
Añade que otra señora cuyo hijo ya fue liberado le ofreció el número telefónico de la cárcel hacia donde habían conducido a Yasdanis, y al llamar supo la noticia de que había sido trasladado para Reloj Club.
“Cuando me dijeron que lo habían trasladado para Reloj Club yo me volví como loca y desde ese momento estoy así. Mi hijo no es un asesino, no es un terrorista, no es un delincuente, no es un ladrón, no es así como lo han pintado”, alegó Marlen.
Posteriormente indica que su hijo ha sido objeto de torturas psicológica y añade que tiene problemas psiquiátricos: “Desde pequeño lo atendía en el William Soler con la psiquiatra Caridad, yo no estoy fingiendo ni mi hijo tampoco”.
“Con él que me metan presa porque no puedo más, quiero a mi hijo de vuelta, lo quiero (…) eso es un abuso, él no es un asesino, él no es terrorista, él no tiró bombas, él no ha hecho nada. La juventud en Güira se volvió loca, que le den una oportunidad, no los destruyan”, suplicó envuelta en llanto.
La madre se muestra preocupada ya que su hijo padece de Artritis Reumatoidea reactiva que se le descubrió en el mes de mayo y permaneció varios días en ingreso hospitalario por esta razón.
“Libertad es lo que pido para mi hijo, yo no quiero más nada, que acaben de hacer lo que van a hacer. Están martirizando a los padres, a los hijos”, destaca la madre que, además, añade que su hijo la llama desde el combinado diciéndole que no puede más, que se quiere morir.
Finalmente alega Marlen que nadie ha ido a notificarle para abogado, no le han mostrado el expediente del caso, que está completamente desinformada, sufriendo una tortura.