Un cubano residente en La Habana denunció a través de las redes sociales que fue arrestado por la policía junto a su primo que es menor de edad cuando estaban haciendo una cola para comprar artículos de primera necesidad.
Se trata de un video que ha sido muy comentado en las redes sociales, pues evidencia un nuevo caso de violencia policial en Cuba, algo que ha venido en aumento desde que se decretó en el país la situación de emergencia por el coronavirus.
Buenas para todos, necesito q miren detenidamente este video en el q aparezco montado en el patrullero y afuera mi primo q es menor de edad, y nos acusaron ami de "DESACATO" y ami primo de "RESISTENCIA" por favor necesito q me den su opinión.
Posted by Yonathan Elegguacito on Saturday, May 16, 2020
“Buenas para todos, necesito que miren detenidamente este video en el que aparezco montado en el patrullero y afuera mi primo que es menor de edad, y nos acusaron a mí de desacato y a mi primo de resistencia. Por favor necesito que me den su opinión”, escribió junto al video.
El cubano identificado como Yonathan contó a CiberCuba que todo comenzó cuando una persona que estaba en la cola en una tienda de La Lisa le dijo a la policía que él y su primo habían intentado adelantarse en la fila.
Posted by Jose Batista Falcon on Monday, May 18, 2020
Luego de eso un oficial agarró por el cuello a su primo y lo montó en la patrulla y que otro policía hizo lo mismo con él luego de intentar asfixiarlo y de colocarle las esposas de una manera brutal.
“Fue todo por gusto porque nosotros teníamos marcado con nuestra prima en la cola de un quiosco donde venden varias cosas, lo cual es mentira y tenemos testigos. El policía fue y cogió a mi primo por el cuello y sin preguntarle nada lo empezó a apretar y vino otro y me cogió por el cuello con tremenda fuerza. Este es el número de la patrulla 301 y la chapilla del policía 05948 ‘por favor necesito ayuda”, expresó.
Posted by Jose Batista Falcon on Monday, May 18, 2020
En las imágenes se puede apreciar que varias personas de la cola intentaron explicarles a los policías que ninguno de los dos jóvenes estaba haciendo nada malo, pero los oficiales se negaron a escuchar sus argumentos y se los llevaron detenidos.