Hermana de preso político del 11J: “No me callo más”

Yaymaris Sebey Mena, hermana del preso político del 11J en Santa Clara, Yunior Sebey Mena, declaró a la plataforma independiente CubaNet que no se volverá a callar, después de haber conocido la sentencia de 7 años de privación de libertad impuesta por el régimen contra su hermano.

Yunior es un artista, padre de dos hijos pequeños, que, como tantos jóvenes en la isla, salió a manifestarse en contra de la dictadura y a exigir el respeto a los derechos humanos del pueblo.

“Mi hermano simplemente salió a expresar lo que sentía, lo que quería, no agredió a nadie. Simplemente lo que hizo fue salir a expresar lo que sentía y pedir libertad, no hizo ni el recorrido completo”, cuenta Yaymaris en una directa de la citada fuente, transmitida la mañana de este jueves.

Según señaló, su hermano fue detenido el pasado 16 de julio en su centro de trabajo, cuando llegaron varios agentes de la policía y le ordenaron que tenía que acompañarlos a la unidad. “Mi hermano les preguntó por qué y le dijeron que por estar en contra de la revolución y por la publicación de los videos de los sucesos del 11J”.

El joven fue conducido a Instrucción Penal, donde permaneció durante 42 días. “Ahí la familia lo que pasó fue mucho, porque nos maltrataban en la parte de afuera cada vez que llegábamos, pero ahí nos manteníamos yendo todos los días para saber de él”.

Yunior fue trasladado posteriormente hacia la prisión conocida como La Pendiente, donde estuvo contagiado con la COVID-19 y las autoridades penitenciarias no les notificaron a sus familiares, sino que se enteraron a través de amistades.

Con relación al juicio, la joven destaca que a su hermano no le probaron nada: “Los testigos que fueron del MININT, decían que él estaba escondido, a pesar de haber visto videos de él transmitiendo en vivo”. Además, precisó que alegaron que él se había enfrentado a la policía, lo cual era incierto, porque cuando los agentes fueron a buscarlos para su detención, él nunca se resistió.

La joven indica que su hermano les pidió que se mantuvieran en un perfil bajo, sin dar mucho a conocer su caso ni realizar denuncias, principalmente para proteger a los niños de ambos y que estos se mantuvieran al margen de la situación.

“Nosotros siempre nos manteníamos bajo perfil, porque él nos lo pedía y yo se lo decía a él, yo voy a estar bajo perfil hasta que llegue la sentencia. Si no veo que la sentencia es una cosa justa, no me callo más, y así mismo fue. Solamente le rebajaron un año y fuimos la familia que más tranquila estuvo”, explicó.

Su hermano mantuvo una buena conducta durante el tiempo que permaneció a la espera de la confirmación de su sentencia y según cuenta la joven, se sintió muy mal al enterarse que sólo le habían reducido un año con relación a su petición fiscal.