Fallece el obispo cubano Alfredo Petit Vergel a los 85 años

El obispo cubano Alfredo Petit Vergel falleció en la Parroquia de San Francisco de Paula en La Habana, a los 85 años de edad, así lo dio a conocer a través de su perfil de Facebook la Parroquia San Julián de los Güines.

En su mensaje, detallaron que: “Hace unos minutos acaba de fallecer Mons Alfredo V Petit Vergel, 85 años de edad, próximo a cumplir 60 de sacerdocio y 30 en el episcopado. Estas líneas no pretenden hacer un recorrido biográfico detallado del prelado habanero aún cuando hay fechas, lugares y tareas pastorales que son imposibles de no evocar”.

La publicación señaló que “Nació en La Habana el 24 de julio de 1936, durante su niñez y adolescencia cursó estudios en el Colegio de los Hermanos de las Escuelas Cristianas en la Capital hasta ingresar en el Seminario El Buen Pastor, donde completó los estudios en Humanidades y Filosofía. Su dedicación al estudio junto a una probada virtud, le hicieron ganar el respeto de parte de sus compañeros de curso y sus profesores. Al tiempo que avanzaba satisfactoriamente en sus estudios, también se fortalecía su vida espiritual y su resuelta determinación de ser Sacerdote”.

Continuaron explicando que “El Colegio Pio Latinoamericano en Roma lo acogió hasta graduarse de Licenciado en Teología en la Pontificia Universidad Gregoriana, tras lo cual recibió el 23 de diciembre de 1961 la ordenación sacerdotal. De regreso a Cuba, muchos son los que todavía hoy le recuerdan como Párroco de la Catedral de La Habana y luego de la Parroquia El Salvador del Mundo en el barrio del Cerro desde donde atendía la parroquia de Nueva Gerona en la Isla de la Juventud. Actualmente se le puede encontrar cuidando, apacentando y guiando como buen pastor a los fieles que acuden a la Parroquia San Francisco de Paula en la Víbora y a la Capilla de Santa Terecita en el barrio Santa Amalia en el Municipio Arroyo Naranjo”.

“Su ministerio como Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de La Habana, la acción pastoral llevada a cabo en la atención como Vicario Episcopal de la Vicaría Sur de la misma, su labor en las Comisiones para la Doctrina de la Fe y el Ecumenismo y para el Diaconado Permanente de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba, así como su trabajo en el Tribunal Eclesiástico de La Habana, le han merecido el respeto y afecto de obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas así como fieles laicos tanto dentro como fuera de Cuba”, dice el texto. 

“Los que tuvimos la dicha de contarlo entre sus profesores nos hacemos eco de su profesionalidad y alto vuelo cultural. En cada turno de clases se daban la mano la educación y la instrucción, un caudal de sabiduría que de forma magistral y amena penetraba no solo en el conocimiento de los seminaristas sino también en el corazón de los futuros pastores. Su peculiar tono de voz grave, sus expresivos gestos, sus refranes, dicharachos y las ocurrentes anécdotas propias de quien ha vivido mucho, se unían a las reflexiones más elevadas en torno a los cánones del Derecho Canónico; materia que impartía y que al decir de algunos; el Derecho con él no se hacía “cansónico”. Si bien algunos recuerdan al maestro que es, muchos no olvidamos su testimonio de buen pastor”, siguen relatando sobre el Monseñor Alfredo.

Finalizan con las sentidas palabras: “Junto a la Cruz de Jesús estaba su madre y así le hemos visto en estos últimos años, junto a la Cruz de Jesús, aguardando con alegre esperanza el día glorioso del encuentro con el Padre. Hoy ha llegado ese día y doy gracias por el regalo que ha hecho a la Iglesia en Cuba con su vida y obra y de modo particular a mi persona. A nuestra Madre la Virgen María de la Caridad le ruego interceda ante su hijo nuestro Señor Jesucristo para que te conceda ser contado entre los santos. El Señor te conceda el descanso eterno y brille para ti la luz perpetua. Tu alma descanse en paz. Amén”.

La muerte del obispo cubano generó que varias instituciones y personalidades hicieran público su pesar por la triste noticia. Entre ellos, la Iglesia presbiteriana-reformada en Cuba, la cual escribió: “Nuestra Iglesia lamenta profundamente el fallecimiento de Monseñor Petit. Damos gracias a Dios por su vida y oramos para que Dios de paz y consuelo a sus familiares, colegas y amistades. Nuestras condolencias a nuestras hermanas y nuestros hermanos de la familia Católico-Romana. “Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida” (Apocalipsis 2:10b)”.

Lo propio hizo la Diócesis de Pinar del Río, dedicando sus palabras al sacerdote habanero: “Estimados hermanos, acaba de partir a la Casa del Padre, Mons. Alfredo Petit, Obispo Auxiliar de La Habana. Nos unimos en oración por el eterno descanso de su alma, confiados en que está disfrutando de la vida junto a Dios, intercediendo por la Iglesia y el pueblo que tanto amó”.

La Pastoral juvenil de La Habana igualmente se unió al pesar de la lamentable pérdida. Difundieron en su perfil de Facebook el siguente mensaje: “Este sábado 7 de agosto ha partido a la Casa del Padre Monseñor Alfredo Víctor Petit Vergel quien fue obispo auxiliar de La Habana. Damos gracias a Dios por su vida, por su ministerio sacerdotal y episcopal; por todo el bien que hizo. Pedimos que Cristo, el Buen Pastor, le otorgue la corona de Gloria que no se marchita. Que descanse en paz”.

De la misma manera lo hizo Casa Cuba de Houston: “Que duerma en la Paz del Señor, Mons. Alfredo Petit (85). Mons. Alfredo Petit Vergel, ha partido a la casa del Padre. Fue un hombre recto, servidor de los servidores de Dios, quien le tocó una época muy difícil en la vida de la Iglesia Católica, bajo el liderazgo del Cardenal Jaime, quien empujó en la política castrista, del lado del cambio fraude… Fue párroco de la Iglesia San Francisco de Paula, y el Movimiento Cristiano de Liberación, se fundó cuando era párroco en la Iglesia del Cerro, con Oswaldo Payá entre otros. Asumo, que debe haber tragado buches amargos, porque el Petit que conocí fue un hombre recto, que tuvo que guardar SILENCIO. Que duerma en la Paz del Señor, ahora que termina su jornada por la vida, entre los que aman y construyen. Y que brille para él, la Luz Perpetua”. 

También lo hizo Pilar Defornaux en su cuenta de la misma red social: “Hace unos breves minutos el Padre Mons. Alfredo Petit, Obispo Auxiliar de la Habana partió hacia la Casa de Dios Padre. Mons Alfredo V Petit Vergel, tenía 85 años de edad, próximo a cumplir 60 de sacerdocio y 30 en el episcopado, larga vida en oración y fe”.   

Numerosos fueron los mensajes de aliento dejados por las personas que seguían la trayectoria de este sacerdote: “EPD que triste noticia, sin dudas la iglesia cubana tendrá otro ángel en el cielo, me uno en oración por su descanso”… “Que pena, triste noticia descanse en paz Padre Petit, que la luz divina lo ilumine en su camino a Dios, acompaño su dolor Padre Juan Carlos, soy testigo de su hermandad y cariño, un abrazo”… “Que triste noticia, ya está con Dios, Padre Juan Carlos nos unimos a usted en oración”… “Que descanse en paz, que sea recibido con el mismo amor que entregó aquí en la Tierra”… “Que Dios lo tenga en Su Gloria, él celebró la misa de mis padres en los 50 años de matrimonio y les concedió la BENDICIÓN PAPAL”… “Que descanse en paz este siervo del Señor que sirvió tantos años con su ejemplo y entrega al pueblo cubano. Brille para él la Luz Perpetua”… “Nunca te olvidaremos, siempre brillarás junto al Señor. Seguirás vivo dentro de nuestros corazones”… “Lo vamos a extrañar demasiado, fue una persona excepcional, siempre vamos a recordar sus enseñanzas.RIP”.

Desde nuestra redacción, hacemos llegar a todos sus familiares y amigos nuestras condolencias.