Liván López Kessel, un enfermero cubano residente en La Habana, que se contagió con el coronavirus mientras desempeñaba su trabajo, contó cómo fue su experiencia como paciente en un centro de aislamiento.
Este joven de 25 años, que trabaja en el Hospital Clínico Quirúrgico del municipio Diez de Octubre, relató que se contagió con la enfermedad en ese mismo centro de salud, mientras atendía a un hombre que dio positivo al coronavirus.
Kessel explicó que al principio de la pandemia se desconocían muchos factores de la enfermedad, como la necesidad de utilizar protectores faciales al momento de atender a los pacientes y que debido a eso se contagió.
“Cuando empezaron los casos en el municipio yo atendí pacientes que luego resultaron positivos. Eran los primeros días, y aunque el país tenía los procedimientos organizados, empezábamos a chocar con la práctica. Como eran los inicios, todavía no era obligatorio andar con nasobuco por la calle, solo las personas con enfermedades respiratorias. Entonces llegó a la consulta de sospechosos un enfermo sin la mascarilla que resultó positivo, luego llegó la hermana en las mismas condiciones. Nosotros cumplíamos las medidas, pero todavía no se empezaban a usar los protectores en los ojos, por ejemplo. Entonces me contagié de ese caso”, declaró.
Durante el tiempo que permaneció asilado, el joven enfermero pudo comprobar lo rápido que se propaga la enfermedad, pues la persona que lo contagió, también enfermó a doce personas de su familia, incluyendo a su esposa e hija.
Livan, enfermero de 25 años, enfrentó el coronavirus primero con su trabajo, atendiendo pacientes; y luego cuando…
Posted by Dirección Municipal de Salud Pública. 10 de Octubre on Monday, May 18, 2020
A pesar que Liván ya superó la enfermedad y recibió el alta médica, aún no se ha reincorporado a su trabajo debido a que todavía no se siente completamente bien, aunque está deseoso de volver a atender pacientes para brindar su ayuda en esta difícil situación.