El joven cubano Mario Josué Prieto Ricardo, residente en Estados Unidos desde 2014 y con ciudadanía española, quien fue sentenciado a 12 años de privación de libertad por los sucesos del 11J, se encuentra ingresado desde el pasado lunes en el Hospital Clínico Quirúrgico “Lucía Íñiguez” de la ciudad de Holguín.
Su novia Roxana Hernández, ofreció declaraciones a la plataforma independiente CiberCuba: “Josué está aquí en el Clínico ingresado, muriéndose. Está ingresado en la sala de penal del hospital con posible esclerosis múltiple, porque tiene muchos temblores que no lo dejan ni levantarse de la cama”.
La joven señaló que su pareja presenta un estado de salud mental delicado, a tal punto que el psiquiatra que le atendió considera que en cualquier momento podría realizar un intento suicida.
Mario ya no puede valerse por sí mismo, cuenta Roxana, y para bañarse y hacer todas sus cosas depende de la ayuda de los demás reclusos que están ingresados junto a él.
Sobre la postura de las organizaciones que pudieran ayudarlo, Roxana expresó: “La embajada de España se limpia las manos con todo lo que le está sucediendo. Nuestro abogado español llamó, pero no lo atienden. No le pasan el teléfono al cónsul o el embajador, aun cuando ellos dijeron que estarían las 24 horas disponibles para el caso de Mario”.
Por su parte, Niurka Ricardo Hidalgo, madre del joven, denunció: “Mi hijo está en una silla de ruedas. Los médicos quieren pasarlo para una sala de neurología para que la familia lo pueda atender y la Seguridad del Estado no quiere”.
Asimismo, señaló que las autoridades penitenciarias no notificaron a la familia sobre la involución del estado de salud de su hijo: “Supimos que estaba ingresado porque una persona allegada a la familia estaba de guardia y lo reconoció”.
El joven es paciente psiquiátrico desde pequeño y sus necesidades de revisión médica periódica y adecuada administración de medicamentos no han sido atendidas durante su estancia en prisión, incluso le ha sido negada la medicación que su madre le ha facilitado.
Mario Josué se encuentra recluido en la Prisión Provisional de Holguín, donde generalmente le entregan solo un litro y medio de agua para cubrir todas sus necesidades de un día. De igual manera, ha recibido alimentos en mal estado, los que le han provocado serias infecciones que han dado al traste con el empeoramiento de sus dolencias, ya que padece de úlcera y gastritis crónica desde hace varios años.