El doctor cubano Manuel Guerra, ha recibido una gran noticia al obtener su licencia de asistente de médico en los Estados Unidos y ya consiguió trabajo en una clínica.
A través de sus redes sociales, el galeno holguinero compartió un mensaje que es reproducido íntegramente a continuación:
“Entregados al trabajo, no hay manera de que la pena nos venza.” JM
En esta gran nación a la cual arribé hace poco más de un año, he desempeñado disímiles labores a lo largo del mismo. Aprendí el oficio de reparar y hacer colchones, laboré en una gasolinera como cajero, en una carpintería, de mantenimiento en un hotel, empaquetando y estibando cajas, en una compañía de limpieza, etc.
En fin, que mientras resolvía los trámites para lograr la legalización en este país, tuve que (en buen cubano), morder el cordobán en lo que aparecía, pues tengo una familia que mantener y eso no es tema para tomar a la ligera.
Aunque he de reconocer que aquí se trabaja con seriedad, lo complejo no eran las labores en sí, sino los bajos salarios y la irregularidad de los mismos, pues al estar sin los documentos pertinentes que me autorizaban a trabajar, pues no quedaba de otra que acogerme a lo que me ofrecieran; parafraseando un capítulo de Elpidio Valdés, (…)-aquí todos hemos tirao’ con fusiles peores (…) pues a mí me correspondía dominar “ese rifle”.
Aunque podría traer a colación un debate de algo inconcebible, cómo resulta el hecho de que ejerciendo los diversos oficios que anteriormente mencioné por un salario mínimo, dada mi previa condición de trabajador indocumentado, aún así tuviese la oportunidad de ofrecer a mi familia una calidad de vida 70 veces superior que la que como profesional de la salud habría podido ofrecerles en mi tierra natal, no es mi intención politizar este post; ese desastre de sistema ya se está cayendo por su propio peso, pues una nación gobernada por mafiosos barrigones y vagos, no va a ningún sitio. Pero reitero, esta publicación no es para juzgar, sino para agradecer y motivar.
Quiero agradecer a Dios, antes que todo, por no darme un peso que no pudiera dominar y por jamás soltarnos de la mano, a mi hijo, que es mi manantial infinito de buenas energías. A mi madre, esposa, a mi padre y familia, a los padrinos de mi Ian que tanto nos han apoyado, y a todas las personas maravillosas que hemos conocido y nos han ofrecido su mano amiga en este gran país.
La clave de todo está en anteponerse a las circunstancias, hacer de la auto-superación un paradigma y reconocer que en esta tierra repleta de oportunidades los límites son impuestos por nosotros mismos.
Cuando trabajaba en la compañía de limpieza tenía que estar en casa de mi empleadora a las 3:30 p.m., llegaba a mi casa alrededor de las 4-5 a.m., incluso en ocasiones se extendía hasta pasadas las 8 a.m.; era llegar, dormir apenas unas horas y me levantaba a las 11:30 a.m., pues de 12 pm a 3 pm tenía de lunes a viernes mis clases de Inglés en el Traviss Technical College. Dormía muy poco, apenas tenía tiempo para mi familia, pero ya estoy recogiendo frutos de tantos meses de sacrificio.
Hoy comienza una nueva etapa en nuestras vidas, tanto mi esposa como yo, ya contamos con la documentación pertinente para trabajar y a nuestro señor gracias ya tengo mi licencia como asistente de médico y pude conseguir en la primera entrevista de trabajo que asistí (en un idioma que ni siquiera es el mío), una posición en una clínica con más del 80 % de los pacientes nativos, donde una vez más estaré haciendo lo que considero parte de mi idiosincrasia, servir y ayudar a potenciar la calidad de vida de los pacientes que pasen por mis manos.
Ya logré infiltrarme en el Sistema de Asistencia Sanitaria de los EE. UU.!!! Aún el camino por recorrer es enorme, millas y más millas, son muy grandes las metas y aspiraciones, pero mayores aún son los deseos de lograrlas.
De la mano de Dios todo es posible, así que, coterráneo que emigraste recientemente y te has visto reflejado en este post por las dificultades que en un inicio nos resultan abrumadoras, constancia y sacrificio, que aquí no hay barreras que frenen nuestros sueños. A echarle muchas ganas!!! Una y mil veces más, GRACIAS!!!.
“Solo perdura y es para bien la riqueza que se crea y la libertad que se conquista con las propias manos”.
José Martí”.