Un grupo de 12 cubanos adultos y una bebé, que se encontraba a bordo de un buque panameño, y se negaban a bajarse en Islas Caimán, fue desalojado de la embarcación por fuerzas especiales y llevado a una instalación de cuarentena de las Islas.
“La situación con los migrantes cubanos a bordo del MV Bulk Freedom se ha resuelto. Más temprano en la noche, la bebé fue retirada junto con los padres. Horas más tarde, los migrantes restantes fueron retirados y escoltados a tierra hasta una instalación de cuarentena del gobierno”, informó en Twitter la estación local Radio Caimán.
Estos migrantes quienes se encontraban bajo pedido de asilo en las Islas Caimán, con libertad de movimiento, pero monitoreados con grilletes electrónicos, se habrían escapado del país peninsular por mar, en una embarcación que, según ellos mismos, compraron a un caimanés. Las autoridades habían perdido contacto con ellos desde la tarde del domingo 4 de abril. El grupo fue entonces rescatado, algún tiempo después, mientras iban a la deriva, a 50 millas al oeste de las Islas, por un buque petrolero que se dirigía al Canal de Panamá.
The situation with the Cuban migrants onboard the MV Bulk Freedom has been resolved.
Earlier in the evening the infant was removed along with the parents. Hours later the remaining migrants were removed and escorted onshore to a Government quarantine facility.
— Radio Cayman (@RadioCayman) April 9, 2021
Desde el rescate, los cubanos se habrían negado a ser regresados al territorio caimanés, alegando que ellos querían ser llevados a Panamá, pues el buque que los rescató tenía la bandera de este país. Sin embargo, se conoce que, en horas de la noche de este jueves, fuerzas especiales de Islas Caimán, entraron en la sala de comunicaciones dentro del Bulk Freedom, donde se encontraban los migrantes y fueron conducidos a la fuerza y bajo cerco policial a las ambulancias.
Continuing coverage of Cuban standoff
Posted by Compass Media on Thursday, April 8, 2021
El suceso se pudo ver en videos subidos a las redes por los mismos migrantes y publicado por América Tevé, donde se escuchaba el forcejeo y los gritos, sobre todo de Erica Álvarez-Freites la madre de la bebé, quien se oyó decir “ay, lo mató” refiriéndose a su esposo Jouz Javier Freites y padre de la niña.