Varios cubanos residentes en diferentes barrios de Guantánamo, han denunciado que sus viviendas están en pésimas condiciones y que a pesar de sus reclamos no reciben ayuda de las autoridades de la provincia, informó CubaNet.
María Elena Azahares, una anciana residente en la comunidad conocida como Los Cocos de Confluentes, relató que el techo de su vivienda está en peligro de derrumbe y que las paredes están completamente agrietadas.
“Mi casa tiene todos los palos podridos ya, el techo se está cayendo, las paredes están en malas condiciones y vivimos cuatro personas, dos niños y dos ancianos. Nos hemos dirigido al partido y a Bienestar Social, pero nadie nos ha dado respuestas”, declaró.
Por su parte, Aimé Mudersia, una joven madre que tiene cuatros hijos y un quinto en camino, dijo que su vivienda también está en pésimo estado, pues el techo se filtra completamente y los niños son asmáticos.
Todos estos vecinos coinciden en algo, las autoridades no han querido darles solución a sus problemas o les dicen que desafortunadamente no cuentan con recursos para arreglar sus viviendas.
“Yo fui con la trabajadora social, ella vino a visitarme, hizo una encuesta, anotó mi situación, pero luego de eso no he recibido ningún tipo de respuesta sobre mi caso”, expresó Mudersia.
En casi todos los casos se trata de personas humildes que no cuentan con recursos económicos para llevar a cabo costosas reparaciones en sus viviendas y que viven con personas vulnerables, ya sean adultos mayores, niños o mujeres embarazadas.
