Desde que tienes a tu hijo, ya sea biológico o adoptado, trabajar en su autoestima es una tarea diaria. A continuación de dejamos algunos consejos que fomentarán esta apreciación.
1.- Enséñale a comprender la importancia del esfuerzo propio y no de los resultados que se obtengan. Ayúdale a entender que su valía nada tiene que ver con lo que consiga o tenga, sino por el esfuerzo que pone para alcanzar sus metas.
2.- Evita sobreproteger a tus hijos ya que puedes fomentarle poca iniciativa en su vida; además de generarle dudas y cero capacidad para tomar decisiones.
3.- Cuando se equivoque en algo procura no castigarlo, trata más bien que aprenda de su error, que lo tome como una oportunidad para mejorar, y así evitará repetirlo en un futuro.
4.- Deja que a medida que vaya creciendo, tome algunas decisiones de acuerdo a sus objetivos de vida. Esto le enseñará a reafirmar que es un individuo y desarrollará capacidades sobre quién quiere ser.
5.- Enséñale y ayúdalo a asumir responsabilidades. Esto fomentará su autonomía e independencia y coadyuvará al desarrollo de sus habilidades e interacción con el entorno.
6.- Enfócate en reforzar sus logros. Sus conductas positivas debes elogiarlas, de esta manera adquirirá confianza y sabrá distinguir entre lo que hace bien, lo que está mal y lo que ambas cosas conllevarán.
7.- Dedica un tiempo exclusivo para tu hijo, esto lo hará sentir importante y sentirá que ocupa un lugar especial en la familia.
8.- Cuando tu hijo tenga conductas inadecuadas, debes buscar la manera apropiada de hacérselo entender, sin que se sienta una constante crítica que vaya deteriorando su autoestima, y por el contrario comprenda que debe mejorar.
9.- Permite que tu hijo trate de resolver alguno de sus problemas, así poco a poco se irá convirtiendo en una persona competente y con capacidades resolutivas.
10.- Evita las compasiones entre tu hijo y otros niños. Especialmente en la adolescencia, los jóvenes son más sensibles al hecho de ser considerados “mejor o menos” que otros chicos de su edad. La idea principal es que tu hijo se acepte y se quiera tal como es.
Cada madre tiene la responsabilidad de enseñar a su hijo a reconocer la valía que tiene como ser humano, y la importancia que tienen sus emociones y experiencias únicas como individuo.