El pasado 19 de febrero de 2020, en la calle Aponte, esquina Misión, en La Habana Vieja, se desplomó el techo de una estructura antigua de la época de la fundación de la ciudad, la cual afectó de manera directa una vivienda que se encuentra justamente debajo del edificio, reportó CubaNet.
Actualmente, persiste el riesgo de que la estructura nuevamente colapse y se venga abajo el edificio y perjudique de manera permanente las casas que están adyacentes a la estructura.
La señora María Caridad Liborio Lima, habitante del sector y propietaria de una de las casas que colinda con la estructura, denunció el peligro de muerte que esta situación supone para ella y su familia.
A pesar de que a las autoridades se les ha notificado la situación en reiteradas ocasiones, aún “no han hecho ningún tipo de gestión para solventarla” dijo María Caridad, quien además, dejó un relato cronológico de todas las solicitudes que ha realizado a las autoridades finalizando con una frase muy particular: “¿Hay que esperar a que nos mate el derrumbe?”.
La anciana hace un llamado nuevamente a las autoridades para que se avoquen en el asunto y se anticipen a las consecuencias de otro posible derrumbe. “Una compañera que vino a revisar el trabajo de poner los palos para apuntalar la casa (me dijo) que la llamara todos los días, pero todo ha sido bla bla bla. Me dice que está en reunión y todo es un pero, o no me contesta y apaga el celular” dijo.
En una entrevista ofrecida al medio de comunicación independiente CubaNet, la señora María aprovechó para dedicarle un mensaje al Gobierno cubano, en el que expresa su profunda preocupación, y hace el llamado a tomar las previsiones haciendo hincapié en el sentido del valor por la vida humana.
“Tengan más preocupación por el pueblo que tanto defienden ―que dicen que defienden―. Les pido que se ocupen más de estos casos, que no pase como con las tres niñas que, a tres cuadras de aquí, un balcón que se estaba cayendo las mató”, lamentó.
También dijo: “Estoy al borde de la locura con toda esta situación, con la presión alta por toda esta situación de pánico que tengo”, se quejó la anciana.