Un padre cubano residente en La Habana, acudió a las redes sociales para denunciar las carencias del sistema de salud de la isla y cómo esta situación afectó a su hija de solo dos años.
Según declaró este cubano, su mamá llevó a su hija al Hospital Pediátrico de Centro Habana porque la pequeña no orinaba, pero como no había sondas, le tuvieron que colocar un guante quirúrgico para recogerle los desechos líquidos.
Además, relató que cuando su mamá se dirigió a la farmacia para comprar los medicamentos que le recetaron a la menor, la mujer que la atendió la trató en bastante mala forma y le dijo que no había nada de eso y que los resolviera como pudiera.
Ya esto es lo último que podía ver de Cuba y desgraciadamente me tocó vivirlo con mi hijita de 2 añitos que hoy tuvo que…
Posted by Pedro Garcia on Monday, January 25, 2021
A continuación, reproducimos íntegramente las palabras publicadas por Pedro García:
Ya esto es lo último que podía ver de Cuba y desgraciadamente me tocó vivirlo con mi hijita de 2 añitos, que hoy tuvo que ir al hospital con mi mamá porque no orinaba y le tuvieron que poner una sonda. Ahí tienen la sonda famosa, un guante quirúrgico porque al parecer las bolsitas las están utilizando para hacer suelas de zapatos, como salió hace poco en un Tras la Huella.
No bastó con eso y al salir mi mamá con la niña en los brazos le preguntó a un taxi que cuánto le cobraba por llevarla y ese perro singao le dijo que 200 pesos, pero continuamos. Mi mamá continuó la odisea del día de hoy camino hacia la farmacia, le entrega las recetas a la perra maleducada de la dependienta y esta al leer le lanzó las dos recetas que una de ella cayó al suelo, diciéndole que eso no lo había, que si ella quería que vigilara el camión de los medicamentos o que viera como resolvía.
Por eso una vez más le deseo a todos los dirigentes y políticos de Cuba que se mueran todos juntos con sus familias, para que Cuba salga de la miseria en la que se encuentra actualmente gracias a la gestión política que tienen esos singaos comunistas, que solo viven por ellos y para ellos. Esos sí son los verdaderos gusanos que se alimentan del pueblo cubano como una sanguijuela, que chupan y chupan hasta que no queda más y aún así tienen el descaro de decir en el menticiero y en la Mesa Retonta que en Cuba todo está normal y que ellos no han alzado ningún precio.
Ya basta de abuso loco, como dice el gato: están apretando. Abajo la dictadura, viva Cuba libre que yo si estoy puesto para hablar con base, eso fue en el pediátrico de Centro Habana.