La celebración del 4 de julio casi termina en desgracia para una familia hispana residente en Fort Lauderdale, pues un niño de solamente siete años fue impactado por una bala perdida mientras se bañaba en la piscina.
El pequeño Jason Puentes, de 7 años se encontraba en casa de abuela disfrutando de la piscina y de momento salió del agua pues sintió un tremendo dolor en el brazo y pensó que lo había picado algún animal.
Sin embargo, cuando su abuela Balbina Ibarra revisó la herida se percató que en realidad tenía una bala en su brazo, por lo que inmediatamente llamó al 911 para que llevaran al pequeño al hospital.
La celebración por el 4 de julio casi termina en tragedia para una familia de origen hispano, residente en Fort…
Posted by Maylin Legañoa Telemundo 51 on Sunday, July 5, 2020
“Tenía un hueco y cuando lo revisamos y nos dimos cuenta tenía la bala incrustada, como si quisiera salir por el otro lado. Él salió de la piscina con su brazo ensangrentado y me decía que le había picado algo. No nos dimos cuenta de donde llegó, ni por donde entró”, declaró la señora a Telemundo 51.
El niño fue trasladado de urgencia al Hospital Broward Health Medical Center y fue sometido a una intervención quirúrgica para retirarle el proyectil del brazo, pero afortunadamente se encuentra fuera de peligro.
Por el momento las autoridades desconocen quién disparó la bala y advirtieron que esto puede ser muy peligroso, pues muchas personas han perdido la vida en estos incidentes.