El Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) emitió un comunicado en el cual exige a las autoridades cubanas que sea transparente en el caso de Hansel Ernesto Hernández Galiano, el joven que fue asesinado por la policía en La Habana.
Se trata de un comunicado en el cual se critica el informe que hizo público el Ministerio del Interior (MININT), hace algunos días para intentar justificar el asesinato y para dar a entender que el policía actuó en defensa propia.
El OCDH dijo que considera poco creíble este informe y ha exigido que se aclaren ciertos aspectos que son fundamentales para comprender lo que realmente sucedió y por qué el policía disparó contra Hansel Ernesto.
Además, el comunicado criticó que las autoridades cubanas quisieran desacreditar a la víctima argumentando que tenía antecedentes penales, algo que no justifica el uso de la fuerza excesiva.
A continuación, reproducimos íntegramente el comunicado del OCDH:
La versión dada por el Ministerio del Interior (MININT) confirma que Hansel Ernesto Hernández Galiano murió a causa de disparos policiales. El relato del MININT, en el que se pretende justificar la actuación policial, es poco creíble y tiene importantes discrepancias con las versiones que, a nivel popular, hay sobre los hechos y que afirman, por ejemplo, que los disparos fueron realizados por la espalda.
También nos preguntamos cómo Hernández Galiano pasó de huir para no ser capturado a convertirse en una amenaza real e inminente para la vida del policía, qué hacía el otro oficial mientras tanto, o qué otro método de neutralización empleó antes de pasar a realizar los disparos.
Una muestra de la debilidad de la historia y de los argumentos oficiales es precisamente el intento por desacreditar a la víctima con reales o supuestos antecedentes penales, que en modo alguno podrían justificar una actuación desproporcionada, tal y como parece ser el caso, y además con unas consecuencias tan graves.
Tampoco entendemos por qué el comunicado oficial en una parte se refiere al policía como el militar y en otra habla de nuestros combatientes, cuando no se trata de un hecho en el que haya intervenido el ejército y, que sepamos, el país no está en guerra.
La muerte de estos ciudadanos está estrechamente vinculada al escenario represivo que vive el país, donde la policía actúa impunemente con métodos hoy cuestionados en todo el mundo.

