Ramsés Isaac Marrero, el ginecólogo encargado de realizar en Cuba el primer parto de una paciente que dio positivo al coronavirus contó a TV Yumurí cómo fue esa difícil y compleja experiencia.
De acuerdo con el testimonio de Marrero, el parto tuvo lugar en el Hospital Mario Muñoz de Matanzas y fue bastante complicado, pues se trataba de una paciente que presentaba la enfermedad y tuvieron que emplear trajes de bioseguridad.
Sin embargo, la cesárea fue llevada a cabo sin ningún tipo de complicaciones y tanto la pequeña como la madre se encuentran en perfecto estado de salud gracias al trabajo que realizaron estos profesionales.
“Una cesárea complicada de una paciente que fue positiva a la COVID-19, un parto que también fue pretérmino; pero se trajo al mundo a una niña que tuvo un peso insuficiente, pero que en estos momentos está bien, al igual que la mamá. Fue un procedimiento bajo mucho estrés, tuvimos que ponernos trajes, guantes, máscaras profesionales y eso es mucha más ropa de la que se usa habitualmente”, declaró.
Marrero quiso agradecer al equipo médico con el que trabajó, pues todos actuaron con una gran profesionalidad y eficiencia a pesar de encontrarse bajo circunstancias difíciles, pues había dos vidas humanas en juego.
Este médico contó que el pasado mes nació su primera hija, pero que aún no ha podido conocerla porque se encuentra trabajando a tiempo completo en el hospital.