Las autoridades hicieron público el video que muestra al auto que atropelló mortalmente a una mujer en un parqueadero de Hialeah, tras suscitarse una discusión por un puesto de estacionamiento el pasado 13 de febrero, reportó América Tevé.
En la grabación se observa a la cubana Olga Fernández de 57 años de edad, minutos antes de su muerte, realizando gestos con las manos, ubicada de espaldas al auto Toyota de color negro que instantes después la atropelló y la arrastró varios metros hasta provocarle que perdiera la vida.
Según explicó Eddie Rodríguez, portavoz de la policía de Hialeah: “Hubo una confrontación entre ella y la persona que estaba dentro de ese carro, pero en el video no se ve ni se escucha lo que estaban hablando. Lo que sí se ve en el video es que la señora se aleja del carro, tienes las manos en el aire como tratando de llamarle la atención a una persona, y es cuando se ve en el video que las luces del auto prenden y le va para arriba con el carro”.
Las autoridades también lograron tener una imagen cercana del auto marca Toyota Corolla de cuatro puertas, y han creado una hoja de búsqueda para que quienes reconozcan el vehículo aporten información a las autoridades y de esta manera poder dar con el paradero del conductor que causó la muerte de Fernández y huyó de la escena.
“Estamos pidiendo al público su ayuda para localizar este carro y necesitamos información sobre el conductor o dónde está el carro”, indicó el oficial Rodríguez.
Resaltó además que se está ofreciendo una recompensa para la persona que provea de información verdadera acerca de la identidad del conductor.
Los funcionarios policiales aseguran que ni el conductor del auto ni la víctima se conocían, por lo que resulta extraño que al acercarse Fernández a la ventana del vehículo y mantener una discusión con el chofer, este decidiera reaccionar de esa forma.
Como se recordará el lamentable incidente ocurrió en el parqueadero del edificio donde residía la mujer, ubicado en la cuarta calle y la primera avenida del oeste de Hialeah, la madrugada del 13 de febrero, cuando su hija le informó que otro auto estaba usando su puesto de estacionamiento. Fernández bajó de su residencia para hacerle la observación al conductor, pero todo terminó en desgracia.